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Manel Montaña

Asesor Técnico de Tintorería

En un sector en el que casi todo el mundo cree saber de todo, y en el que se impone el popular dicho de que "cada maestrillo tiene su librillo", brilla con luz propia este catalán de cincuenta años que ostenta como carta de presentación, la de toda una vida dedicada al estudio y desarrollo de la tintorería. Y es que Manel, como le llaman los amigos, es de las pocas personas en España, que puede acreditar una titulación oficial de Tintorería, obtenida después de tres largos años de estudio en Londres, donde siendo mozo, lo mandó su padre para que conociera y dominara las técnicas y secretos de la tintorería, para posteriormente incorporarse a la empresa familiar. Y ese es el inicio de una larga y densa trayectoria profesional, rica en facetas y matices entre los que es difícil encontrar una actividad o faceta de la profesión que no haya escudriñado y dominado. Porque Manel es de esas pocos elegidos que ama su profesión, que la vive intensamente y que forma parte de él mismo, de su persona. Por decirlo de alguna forma, Manel Montaña es un Tintorero con Mayúsculas. Su vida profesional se ha forjado en multitud de vertientes, desde la etapa de la empresa familiar, hasta el desarrollo y diseño de proyectos empresariales ambiciosos, investigación y estudio de sistemas alternativos de la limpieza en seco, desarrollo y mejora de productos avanzados y por último el asesoramiento técnico y la docencia. Sus más recientes aportaciones al sector, denotan ese talante generoso y entregado a nuestra profesión. Impulsor y fundador de la Asociación Española de restauradores de piel, escritor y colaborador de lujo de la revista TintoLimp, brillante orador en el II Congreso Nacional de Tintorerías de Oviedo, en el que nos deleitó con una magistral conferencia sobre "El lavado en medio acuoso como alternativa al percloroetileno", y por último destacar su vertiente quizá más entrañable, la Enseñanza. Porque para enseñar hay que llevar algo dentro, y Manel es de esas personas que atesora dentro de sí innumerables conocimientos, multitud de secretos. No hay más que preguntarles a sus alumnos. Profesor meticuloso, de verbo sencillo y directo, sabe transmitir pausada y de forma entendible para el tintorero esos conocimientos a veces arduos y complejos ofreciendo esa sensación de seguridad y confianza que todo alumno agradece. Sus últimos trabajos hablan por sí solos, Profesor en innumerables cursos de tintorería en la "Fundación Privada Román Prado Júnior", profesor en cursos de reciclaje profesional del Gremi de Tintorers de Barcelona y por último la incorporación como valioso colaborador en la redacción de "latintoreria.net" donde desarrollará la sección de conocimiento y mantenimiento de maquinaria.

Desde estas líneas, el equipo de redacción de La Tintorería , no podemos más que decirle:

Gracias Manel.

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El Desmanchado

Depart. Técnico

Los Tipos de Suciedad La limpieza de la Piel El Desmanchado La Limpieza de Alfombras Wet-Cleaning Vicios y Virtudes del Per

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General

Los Productos Químicos

La actividad de la tintorería y lavanderia se esgrime como el "Arte" de las "Disoluciones".
Y decimos arte, porque a pesar de que los procesos químicos que se estblecen en la actividad, forman parte de una ciencia, la aplicación arriesgada y en cierta forma arbitraria que de ellos efectúa el tintorero, en caso de tener éxito, se convierten en todo un arte. Y en las siguientes líneas vamos a explicar el poqué.
En Química se entiende por "solución" o "disolución, a una mezcla homogénea y variable de dos o más compuestos, el soluto y el disolvente, en la cual un compuesto el soluto, se diluye o se dispersa en el otro llamado disolvente.
Y en esencia nuestra actividad consiste en ello, en efectuar adecuadamente disoluciones. Cuando desmanchamos o lavamos, los único que hacemos es, que mediante el empleo de diversas sustancias disolventes, (agua, percloroetileno, hidrocarburos, oxidantes, humectantes, quitamanchas, etc.) conseguir una disolución del soluto presente en las prendas a lavar (suciedad, polvo, y cualquier tipo de materia que origina una mancha) en un medio disolvente, para así poder eliminarlo de la prenda.
Pero el tintorero no lo tiene tan fácil. Si bien el químico puede conocer a pr¡ori los compuestos que emplea para realizar sus ensayos, para el tintorero, estos, son totalmente desconocidos. Pero si no fuera suficiente con ello, cuenta además con el inconveniente o agravante, de que dicho soluto o suciedad, se encuentra depositada en un soporte que también desconoce (los tejidos), y que también es susceptible de convertirse en soluto del disolvente empleado.
Si bien el químico dispone de medios y tiempo para realizar sus pruebas y ensayos, el tintorero se ha de transformar en una especie de corredor de Formula 1, y decidir en instantes y casi instintivamente los productos que va a emplear.
Desde luego, esta práctica constituye toda una odisea, y por ello nos reafirmamos en que lavar y quitar manchas adecuadamente constituye todo un "Arte".

Desde las siguientes secciones iremos publicando las pautas, métodos y trucos para que nuestra arriesgada actividad se convierta en un arte y no se transforme en un fracaso.

En los inicios de la tintorería moderna, los tintoreros relizaban sus propias formulaciones, jabones y quitamanchas. Hoy en día los avances y descubrimientos en el terreno de la química, hacen del todo innecesaria tal función. La química a puesto al alcance del tintorero los mejores productos, que pueden resolver con eficacia la problematica de la limpieza actual.